Prensa Mincyt/Karina Depablos.- En el marco de la celebración de su XXII aniversario, integrantes de la red de Productores Integrales del Páramo (Proinpa) participaron en un taller sobre biotecnología de semillas y biofertilizantes, con el objetivo de resguardar la biodiversidad y promover con éxito la multiplicación de alimentos soberanos.
Esta actividad, organizada por la Corporación para el Desarrollo Científico y Tecnológico (Codecyt) contó con la presencia de las investigadoras Maira Oropeza, Alicia Cáceres y Maybeling Junco, como las ponentes principales, quienes además realizaron prácticas de campo y diversas pruebas bioquímicas y morfológicas con los participantes.
Maira Oropeza, coordinadora del Laboratorio de Mejoramiento Vegetal de la Universidad Central de Venezuela (UCV), explicó que el taller tuvo una duración de cinco días y estuvo dirigido a los productores de Proinpa, así como a los trabajadores del Centro Biotecnológico de Producción de Semillas Agámicas (Cebisa).
“La actividad tuvo tres objetivos principales: fortalecer el aprendizaje en las técnicas de cultivo in vitro para el personal del Cebisa; diagnosticar la existencia o no de patógenos bacterianos en las áreas de los laboratorios y mejorar los conocimientos sobre los microorganismos presentes en el suelo y su relación con la agricultura”, expresó.
La especialista del IBE indicó que este curso también busca potenciar las capacidades en las técnicas de micropropagación, organogénesis y embriogénesis somática con el fin de ampliar el universo del germoplasma de rubros como la papa, zanahoria, ajo, café y fresa.
Asimismo, Maybeling Junco, investigadora de Codecyt, reforzó los conocimientos teórico-prácticos en el manejo de las hormonas vegetales sintéticas aplicadas a estos procesos agroproductivos. Además, con los asistentes al taller, ensayaron el diagnóstico y manejo de las bacterias fitopatógenas asociadas a los cultivos in vitro.
Adicionalmente, la investigadora Alicia Cáceres, coordinadora del Laboratorio de Nutrición Mineral de Plantas Silvestres de la UCV, disertó sobre la importancia de la biota del suelo en el ciclaje de nutrientes a través de la observación de las micorrizas presentes en el suelo y el efecto rizosférico de los microorganismos en la agricultura.
Las ponentes reiteraron que este tipo de actividad didáctica impulsa la producción de semillas de alta calidad por medio de la innovación, solidaridad y creatividad, conceptos fundamentales que abarca la Alianza Científico-Campesina, una escuela en los territorios dedicada a fortalecer las capacidades productivas agroecológicas del país y a contribuir a la felicidad del pueblo.
Por su parte, la ministra del Poder Popular para Ciencia y Tecnología, Gabriela Jiménez-Ramírez, comentó que la Alianza Científico-Campesina es una iniciativa del pueblo venezolano dirigida a defender, conservar y multiplicar nuestras semillas para defender la vida.
“Es defender los territorios de comunidades indígenas y campesinas. Es defender a Venezuela ante cualquier amenaza de dominación. La única forma que tenemos para defendernos es resguardar nuestra semilla, es una forma de resistir los modelos de dominación”, enfatizó.


