“¡Como el virus, el bloqueo asfixia y mata, y debe cesar!”

Prensa Mincyt/Karina Depablos.- Con la llegada de Joe Biden a la Presidencia de los Estados Unidos, el pueblo cubano se llenó de esperanza porque una de las promesas electorales era revertir rápidamente las acciones tomadas por el gobierno de Donald Trump; sin embargo, nada cambió, las medidas coercitivas unilaterales se encuentran vigentes y en completa aplicación práctica.

Durante la presentación de la resolución en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para el levantamiento del bloqueo genocida de EE. UU. impuesto desde el año 1961, el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, aseguró que el imperio estadounidense asumió el virus como aliado en su despiadada guerra no convencional.

“Recrudeció, de manera deliberada y oportunista, el bloqueo económico, comercial y financiero; y provocó a Cuba pérdidas por alrededor de 5 mil millones de dólares. Donald Trump aplicó 243 medidas coercitivas unilaterales, todas siguen vigentes. Adoptó medidas propias de tiempo de guerra para privarnos de combustible; persiguió los servicios de salud que prestamos en numerosos países e incrementó el acoso a transacciones comerciales y financieras”, manifestó.

El canciller cubano insistió en que el daño humano del bloqueo es incalculable y resaltó que la vida de ninguna familia cubana escapa de los efectos de esta inhumana política imperial.

“El bloqueo económico, comercial y financiero ha golpeado nuestras finanzas y los gastos asociados a la COVID-19; sin embargo, Cuba buscó proteger a todos del virus, activó su universal y sólido sistema de salud y contó con la abnegación, la disposición al sacrificio y la alta calificación de su personal; movilizó al potencial científico nacional y a su industria biofarmacéutica de nivel mundial”, recalcó.

Potencial científico al servicio de los pueblos

Bruno Rodríguez Parrilla puntualizó que es un hecho notable que una pequeña isla bloqueada haya producido cinco candidatos vacunales anti-SARS-CoV-2 y que ha logrado aplicar tres de estos en estudios de intervención a 2 millones 244 mil 350 cubanos con al menos una dosis.

“Nos proponemos vacunar al 70 por ciento de la población durante este verano y al total de la misma antes de concluir el año  2021, a pesar de que el bloqueo está obstaculizando de forma severa el escalado industrial de dichas producciones. Todo este esfuerzo ha permitido mantener, comparativamente, una muy baja letalidad de la pandemia, en especial entre el personal de salud, lactantes, niños y embarazadas”, subrayó.

En su intervención ante la ONU, el representante diplomático explicó que las estadísticas de Cuba en pandemia son un resultado ilustrativo del esfuerzo de la ciencia al servicio del pueblo y de la eficacia de la función pública a pesar del bloqueo.

“El bloqueo es una violación masiva, flagrante y sistemática de los derechos humanos de todo el pueblo de Cuba que, según la Convención de Ginebra de 1948, constituye un acto de genocidio”, comentó.

En este sentido, indicó que los Estados representados en la ONU también son víctimas del impacto extraterritorial del bloqueo que lesiona su soberanía, infringe sus legislaciones nacionales y los somete a decisiones de cortes de justicia estadounidenses, todo ello en violación del Derecho Internacional.

“No es legal ni ético que el Gobierno de una potencia someta a una nación pequeña, por décadas, a una guerra económica incesante, en aras de imponerle un sistema político ajeno y un gobierno diseñado por ella. Es inaceptable privar a un pueblo entero del derecho a la paz, al bienestar y al progreso humano. El reclamo de Cuba es que nos dejen en paz, es vivir sin bloqueo, que cese la persecución de nuestros lazos comerciales y financieros con el resto del mundo”, reiteró.

Finalmente, el ministro de Relaciones Exteriores cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, agradeció profundamente las ayudas solidarias de las naciones aliadas y de los amigos de Cuba en diversas latitudes, como es el caso de Venezuela, un pueblo también asediado y atacado por el Gobierno de EE. UU.

Val destacar que, recientemente, el pueblo de Venezuela recibió el primer lote de la propuesta vacunal Abdala contra el SARS-CoV-2, producida por Cuba, como parte de los convenios de cooperación que existen entre ambas naciones, el cual abarca 12 millones de dosis en los próximos meses para incorporarlas al plan de vacunación que adelanta el Gobierno venezolano.

“Nos alienta contar con el respaldo de miles de personas que en todo el mundo se han congregado para reclamar al Gobierno estadounidense que ponga fin al bloqueo. ¡Como el virus, el bloqueo asfixia y mata, y debe cesar!”, precisó el canciller cubano.

Las mujeres, las más afectadas por la COVID-19 y el bloqueo imperial en Venezuela

Prensa Mincyt/Karina Depablos.- Un reciente estudio reveló que las mujeres en Venezuela han sentido con mayor impacto los estragos de la pandemia de COVID-19 y el constante asedio imperial.

Este proyecto es una iniciativa de un grupo de féminas especialistas de la Universidad Central de Venezuela (UCV), la Universidad de Carabobo (UC), la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV) y el Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC), y tiene como finalidad descubrir, en este sector de la población, los efectos emocionales, sociales y económicos que ha generado el confinamiento por la COVID-19, así como las medidas coercitivas impuestas por el Gobierno de EE. UU.

La doctora en Ciencias Sociales Mitzy Flores explicó que el estudio se basó en una encuesta aplicada a 530 mujeres, mayores de 35 años de edad, de todo el país, para analizar los temas que más las agobian en un momento crítico para el mundo por la pandemia del nuevo coronavirus y, en Venezuela, por los constantes ataques que afectan seriamente la economía y  sectores tan esenciales como los servicios médicos. 

“El 73 % de las mujeres que contestaron el cuestionario son jefas de familia y el 91 % son responsables del trabajo doméstico en el hogar. El tema que más las ha afectado es el acceso a la salud, medicinas y servicios básicos, como el agua, porque sienten que es muy difícil cumplir con las medidas de bioseguridad, si no cuentan con el vital líquido”, señaló.

Con base en las respuestas de las féminas, Flores, quien también tiene experticia en Políticas Públicas y Justicia de Género, declaró que la mujer venezolana siente la obligación de cuidar y proteger a su núcleo familiar por lo que, aparte de los problemas cotidianos, recibe una carga emocional extra que la lleva a estar exhausta y abrumada.

“Culturalmente, la sociedad les atribuye a las mujeres responsabilidades y roles específicos, y esto es un peso adicional para las mujeres, a diferencia de los hombres. Es una construcción social. La pandemia dejó ver lo que ocurre en el país y el mundo: la inequidad de género. El aislamiento social agudizó la situación que veníamos viviendo. Es una rareza en las familias venezolanas que el trabajo doméstico se comparta con la pareja; no es compartido”, enfatizó.

Una luz de esperanza

Durante su participación en el programa radiofónico Date con la ciencia, la investigadora Mitzy Flores aseguró que, aunque el estudio reveló que las venezolanas han padecido bastante en un año de cuarentena, también mostró que las mujeres usaron sus propios mecanismos para sostener y preservar la vida.

“Nuestra investigación dejó ver que la venezolana supo responder a la pandemia y se mantuvo activa y productiva.  Las encuestadas buscaron siempre hacer otras cosas, buscaron apoyo en redes comunitarias, vecinales, con organización social lucharon para cubrir sus necesidades básicas”, subrayó.

En tal sentido, Flores indicó que uno de los aspectos más significativos del estudio fue que la población femenina respondió que se sentían sobrecargadas y cansadas, pero aseguraron que mantenían una actitud muy optimista y esperanzadora cuando pensaban en el futuro.

“Ante la pregunta de la vida pospandemia,  86.7 % de nuestras mujeres  piensa que la vida va a cambiar y sus expectativas son muy positivas. Eso demuestra que ante la adversidad ellas ven una oportunidad de crecer y de contribuir a cuidar y velar por el bienestar de las familias”, puntualizó.

Lado oscuro del aislamiento

Sobre la convivencia en tiempos de confinamiento comunitario, la científica Mitzy Flores declaró que, a nivel mundial, la violencia de género ha aumentado notablemente durante la cuarentena por la COVID-19.

“El confinamiento, el aislamiento social ha aumentado los números de violencia contra las mujeres y los hijos dentro del hogar. Muchas mujeres han resultado maltratadas por la convivencia constante con el agresor. En nuestra encuesta, 38 % reportó conocer a una mujer que sufrió  de violencia durante la cuarentena”, expresó.

Sin embargo, Flores dijo que el 79 % reportó que no fue víctima de violencia de género, a pesar de reconocer fácilmente las agresiones en personas conocidas.

“Inferimos, lamentablemente, que de alguna forma hay una naturalización de la violencia de género porque la reconoces frente a ti, pero es muy probable que no reconoces cuando eres violentada. Muchas de nuestras mujeres que sufren agresiones creen que no es mayor cosa y que ese momento va a pasar. Es la naturalización de la rutina violenta en los espacios privados de la familia”, añadió.