Agricultores y académicos intercambian experiencias y saberes para conservar semillas

Prensa Mincyt/Miroslava Cariel.- Más de 3 mil familias campesinas trabajan de la mano con investigadores académicos en la conservación de los recursos fitogenéticos de Venezuela, en el marco de la Alianza Científico-Campesina.

La especialista en Fitotecnia y asesora de la Corporación para el Desarrollo Científico y Tecnológico (Codecyt), Nayiri Camacaro, significó en el conversatorio virtual “Recursos fitogenéticos”, realizado recientemente a través de la plataforma WhatsApp, que “estos insumos con una identidad genética” son vitales para la subsistencia de la humanidad.

De acuerdo con esta investigadora, la conservación y el uso sostenible de los recursos fitogenéticos son necesarios para garantizar la producción agrícola, ante los crecientes desafíos ambientales. “Los recursos fitogenéticos son la base para mejorar la capacidad de los cultivos y responder a los efectos del cambio climático”, indicó la experta.

A largo plazo, la pérdida de estos recursos puede derivar en una grave amenaza para la seguridad alimentaria mundial: “El uso mejorado de la diversidad genética y la conservación son claves para afrontar los desafíos actuales del mundo agrícola”.

Explicó que, en Venezuela, la metodología que se sigue para el resguardo de los recursos fitogenéticos y el mejoramiento de la calidad de los cultivos, parte de un trabajo colaborativo entre científicos y comunidades campesinas denominado “fitomejoramiento participativo”.

Según este método, se valora el conocimiento tradicional de los agricultores y se aplican de forma coherente los conocimientos académicos que apoyen la obtención o selección de un material vegetal con características genéticas interesantes, tal como explicó Camacaro.

Camacaro aseguró que, al hacer énfasis en la conservación de los recursos fitogenéticos, las comunidades fortalecen su nivel de conciencia sobre la importancia de conservar sus variedades de semillas locales a favor de su propia soberanía alimentaria.

Diversificación agrícola

“En la actualidad, en el mundo más del 60 % de los cultivos está basado en el arroz, el trigo, el maíz y la papa. Por esta razón, es importante recuperar estas semillas, pero también multiplicar otros cultivos”, aseveró la especialista.

Camacaro alertó acerca de la necesidad de no seguir dependiendo de pocas especies y pocas variedades de semillas. Para esta especialista, una mayor diversidad está directamente relacionada con mejores condiciones para la salud humana y para el ambiente.

Venezuela, país biodiverso

Camacaro destacó que Venezuela es el noveno país del mundo con mayor biodiversidad. “En el país, la mayor riqueza de especies se concentra en la región de Guayana, en los Andes, en la cordillera de la Costa y en los Llanos”. La investigadora también expresó que la nación bolivariana es uno de los centros de cultivo más importantes de Latinoamérica en leguminosas y otros rubros.

Durante la conversación, la representante de la Codecyt enfatizó que la conservación de los recursos fitogenéticos está vinculada con el resguardo y la socialización de saberes tradicionales y ancestrales asociados al manejo y al uso de las semillas, como un patrimonio cultural de gran importancia.

La especialista recalcó la importancia del acompañamiento durante la formación de los productores agrícolas para que puedan cuidar sus recursos fitogenéticos, mediante la construcción y la apropiación de conocimientos específicos.

Vale mencionar que esta es la primera de una serie de charlas promovidas por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) en Venezuela y por Codecyt, como parte del proyecto “Fortalecimiento de las capacidades científico-tecnológicas de las comunidades agrícolas para el escalamiento de semillas de cereales (maíz y arroz), hortalizas y leguminosas, en Mérida, Trujillo, Portuguesa y Miranda, con enfoque de gestión de riesgo agroclimatológico, seguridad alimentaria nutricional y bajo el modelo de la Alianza Científico-Campesina”.