La lectura como medicina para el estrés

Diversos estudios asociados a la neuropsicolgía, ciencia que se ocupa de aclarar las relaciones entre las funciones cerebrales y la conducta humana, aseguran que leer relaja la tensión y ayuda a modificar los estados mentales ansiosos.

En el mundo acelerado actual, la lectura, además de entretener, otorga ese escape a veces necesario de la hiperactividad en la que se vive, fortalece también la imaginación, promueve la cultura conocimiento, aumenta el vocabulario y tiene un efecto antiestrés.

Según refiere el portal web Ethic, la Universidad de Sussex determinó luego de una exhaustiva investigación que “una lectura de seis minutos tiene la capacidad de disminuir los niveles de estrés hasta en un 68 por ciento”.

El estudio que midió distintas reacciones sobre los niveles de cortisol y la frecuencia cardíaca de un grupo de voluntarios ante diversos métodos de relajación, demostró que para aliviar el estrés, leer un libro es mucho más efectivo que caminar, escuchar música o hacer una pausa para tomar café.

Entonces, invirtiendo unos seis minutos diarios en el maravilloso mundo de las letras, nuestro ritmo cardíaco se ralentiza relajando la tensión muscular. Y con ello, se puede lograr alterar de forma positiva nuestro estado mental y emocional, lo que resulta sumamente interesante para las personas que padecen de algún tipo de ansiedad o estrés.

Este es el motivo por el cual, leer antes de descansar luego de una jornada agotadora, nos ayuda a desconectar de los agobios y los problemas, y contribuye a disminuir los niveles de insomnio.

El doctor francés, David Lewis, en su estudio sobre la capacidad antiestrés de leer, asegura que realmente no importa qué tipo de libro leas, ya al adentrase en la imaginación del autor se explora en un mundo fuera de lo cotidiano y al perderse en un libro completamente fascinante se puede escapar de las preocupaciones, representando un subidón anímico y de satisfacción vital para el ser.